
Ospino, – Una situación irregular se presentó ayer jueves en horas de la tarde en el municipio Ospino, donde funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) detuvieron a una ciudadana identificada como Flora Marqués, alegando una orden de desalojo de su vivienda, en la que ha residido durante aproximadamente veinte años.
La principal denuncia radica en la falta de presentación de cualquier documento legal que justificara el desalojo. Según lo reportado, los funcionarios de la PNB no mostraron ninguna orden emitida por la Fiscalía ni por tribunal alguno, mucho menos una orden del Instituto Regional de la Vivienda (Inrevi), ente encargado de la construcción de dichas viviendas. Esta situación genera serias dudas sobre la legalidad del procedimiento.
El dirigente comunitario Douglas Antonio Yépez denunció haber sido agredido verbalmente por un funcionario policial, quien presuntamente sería uno de los jefes del operativo. La agresión, según Yépez, se debió a que estaba grabando la situación irregular. Como consecuencia de este incidente, Yépez denuncia la retención arbitraria de su motocicleta, como una represalia por haber documentado el procedimiento.
La ausencia de una orden judicial o administrativa por parte de las autoridades competentes, como la Fiscalía o Inrevi, convierte el desalojo en un acto potencialmente ilegal. La actuación de la PNB, sin la debida autorización, genera preocupación por el respeto a los derechos ciudadanos y el debido proceso.
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