Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo


El señor Ángel Lucena ha formulado una denuncia pública sobre una grave situación que afecta al ecosistema acuático en la zona de Nueva Florida, ubicada en el Municipio Santa Rosalía del estado Portuguesa. Según su testimonio, se estaría utilizando una malla metálica, conocida localmente como «malla alfajor«, para bloquear la migración de los peces en el río Portuguesa, lo que impediría el normal desarrollo de su ciclo de vida.⁣

En un llamado de atención a las autoridades, Lucena detalló que la malla está instalada «allá abajo en los esteros», específicamente en la «boca del estero». Explicó que, a diferencia de los chinchorros tradicionales que se hunden y permiten el paso de los peces, esta malla metálica crea una barrera permanente que los atrapa e impide su movilidad.⁣

«¿Cuando un pescado hunde una malla alfajor?, eso no lo va a hundir más nunca. Un chinchorro lo hunde y él pasa, pero no la malla alfajor», afirmó Lucena. Esta obstrucción, según su testimonio, ocurre en un momento crítico del año para la reproducción y desarrollo de las especies, conocido localmente como «ribazón» o «riazón».⁣

Alertó con urgencia que esta es la época en la que el fenómeno de la «ribazón» debe ocurrir, ya que es fundamental para que los peces completen su ciclo biológico. «Esa reacción tenía que pasar ahorita porque ella tiene que pasar antes que el río baje más. Porque después que el río baja más, el pescado no puede salir del estero», explicó.⁣

El bloqueo de la migración evita que los peces desoven y se reproduzcan, impactando directamente en la sostenibilidad de las poblaciones ícticas. «El pescado no va a bajar a hacer su ciclo de vida para las cucas, para que el mamón agüevia», señaló, utilizando terminología local para describir el proceso reproductivo.⁣


La denuncia también señala una presunta complicidad o negligencia por parte de los inspectores de pesca responsables de la zona. ⁣


Este no sería un problema aislado, sino una situación recurrente. Lucena reveló que el año pasado ya se había realizado una denuncia similar, la cual tuvo un efecto temporal. «El pescado el año pasado se denunció y medio lo soltaron unos días pasó y volvieron a tapar y volvió a pasar después otro puño», afirmó, sugiriendo un patrón de conducta por parte de los infractores.⁣

Como evidencia de la anomalía, Lucena señaló la paradoja que se observa en la «Boca de Coquito», donde se puede ver una gran cantidad de canoas que transportan pescado. «¿De dónde están saliendo ese pescado si no hay ribazón?», cuestionó, insinuando que la captura masiva solo sería posible mediante el uso de métodos ilegales como la malla denunciada.⁣

El denunciante hizo un llamado urgente a las autoridades para que actúen de inmediato, antes de que sea demasiado tarde para el ciclo de vida de los peces este año. «Le estoy haciendo la denuncia con tiempo para que se aboque», expresó, mientras alertaba a la comunidad sobre la situación: «Atención con la ribazón del río portuguésa. Atención con la ribazón».⁣

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