
De aquel muchacho que vendía empanadas en el Central Las Majaguas no queda nada. Emprendió una carrera política que lo ha llevado a ser alcalde en dos municipios y Gobernador del Estado. Primero fue un candidato independiente con el movimiento de los tiveros y después se incorporó al MVR y al PSUV. En su gestión como alcalde, lo enfrentó el entonces diputado José Ernesto Rodríguez por el caso del balneario, donde fue responsabilizado administrativamente, pero que Antonia Muñoz le metió su mano salvadora y poderosa, de entonces. Ya antes había trabajado con Robert Timaure como office boy y luego concejal de AD con el viejo Biscardi.
Primitivo Cedeño siempre ha sido blanco de los ataques por corrupción, autoritario, abuso de poder y peculado de uso, pero en estos tiempos revolucionarios, eso no hace mella en la dirigencia roja, que se hizo rica súbita y vorazmente. Y el protagonista de esta hora lo tapa todo con una mediática y tenaz vocación de trabajo, que no se le puede negar, pero que se queda en tapar huecos, poner bombillos, colocar bombas de agua y cobrar bien caro los impuestos, Los lujos, excesos éticos y privilegios de esta pareja imperial que es dueña, como el que paga y se da el vuelto, de los destinos de nuestra entidad, no tienen parangón en la historia política de Portuguesa.
Toda escoba nueva barre bien. Tivo tenía en sus planes ser gobernador, pero no tan rápido, hasta que una confabulación contra Rafael Calles, que él ayudó a construir sin querer, lo saca del juego y se empeña en colocar en su lugar, a quien pudiera ser su propio verdugo. Y si son como Santo Tomás, la primera muestra es la designación y primera intervención pública de la presidenta de Hidrosportuguesa, cuando arremete contra Calles y su antecesor, por la pésima gestión en materia de agua.
Repartió el gobierno con una cuota de poder para cada quien. Basile para Antonia. María Morillo para Wilmar Castro Soteldo. Calles tiene cuatro fichas suyas en el gobierno de Cedeño. Los Torrealba también tenían lo suyo, aunque un desliz con el hijo de Francar Martínez, los tiene enfrentados por ahora, hasta el punto de que lucen irreconciliables y por allí comienzan las grietas de una alianza que pone el riesgo la voracidad de Primitivo y su esposa, presidenta del Consejo Legislativo, Primera Combatiente, manejadora directa de algunos servicios que presta el estado y virtual Alcaldesa de Araure, porque allá no se mueve un dedo, sin que lo ordene María Gabriela. La pobre María Celeste está literalmente, pegada en la pared. El mismo hecho de la designación de Francisco Torrealba como coordinador de la comisión que supervisará la elección de delegados al Congreso del PSUV, va indicando que si no se avispa, y de eso sabe bastante el Gobernador, va a quedar sólo como la una, con su comparsa araureña y la emperatriz.
No se le puede quitar lo bailado a Cedeño en sus primeros días. La llamada fiesta del agua, mediáticamente le ha funcionado. La supermovilización de maquinarias, vallas y vías cerradas, para tapar huecos, con asfalto que siempre ha sido su negocio, impresiona, ante la desidia de 22 años de su propia revolución y lavándole la cara al peor alcalde de este país. Pero un gobernador no es para eso nada más. Y Guanare no es Agua Blanca, que tiene pocas calles. Casi dos centenares de barrios y urbanizaciones reclaman el olvido de esta revolución que los sumergió en el abandono y en una pobreza extrema. La sed secular del caso urbano capitalino no se resuelve con pozos profundos de altísimo costo, sino con una renovación de la red de distribución que cuesta dinero. Los barrios exigen agua potable, cloacas, alumbrado público, transporte urbano, menos apagones y atención en salud, que poco vieron en estas dos décadas negras.
La otra cosa es el sectarismo. Cedeño no quiere saber nada de los alcaldes de Sucre, Unda, Ospino y Guanarito, que haciendo milagros financieros, están al frente de sus municipios y de su gente. El tipo les hizo la cruz y se los dijo que las pocas obras que se hicieran allí, se harían con la dirigencia del PSUV. La pose democrática de los primeros días viene dando paso al verdadero rostro de Primitivo Cedeño.
Plata va a tener. 500 mil dólares mensuales por los peajes, ingresos que deben pasar por el parlamento regional, casi 24 millones de verdes en situado constitucional y parece que Maduro le manda algo especial todos los meses, para que cuide bien la zona. Tivo se llevó en los cachos, la conseja de Andrés Eloy Blanco: hace más bulla que carro viejo y diputado nuevo.

