
Hoy, domingo 16 de febrero, se cumplen 40 años de la siembra de Ely Rafael Primera Rossell, conocido como Alí Primera, el Cantor del Pueblo Venezolano, cuya vida y obra continúan siendo un faro de inspiración para las luchas sociales y la defensa de los más humildes.
Nacido el 31 de octubre de 1941 en Coro, estado Falcón, Alí Primera fue un poeta, músico, compositor y activista político que dedicó su vida a denunciar las injusticias sociales a través de sus canciones. Con una voz profunda y letras cargadas de conciencia, se convirtió en un símbolo de la resistencia popular en Venezuela y América Latina.
Su música, catalogada como «canción necesaria», trascendió fronteras y generaciones. Temas como «Techos de cartón», «Canción mansa para un pueblo bravo» y «La patria es el hombre» se convirtieron en himnos de lucha y esperanza para millones de personas. Alí Primera no solo cantó al pueblo, sino que vivió y luchó junto a él, defendiendo siempre los ideales de justicia, igualdad y soberanía.
El 16 de febrero de 1985, el pueblo venezolano lloró la partida física de Alí Primera, quien falleció en un trágico accidente de tránsito en Caracas. Sin embargo, su legado no murió ese día. Alí fue sembrado en el corazón de quienes creen en un mundo mejor, y su música sigue siendo un instrumento de lucha y unidad.
A cuatro décadas de su siembra, el gobierno venezolano, junto a organizaciones sociales y culturales, ha organizado una serie de actividades para honrar su memoria. Conciertos, foros, exposiciones y recitales poéticos se llevarán a cabo en todo el país, recordando que Alí Primera no es solo un artista del pasado, sino un faro que ilumina el presente y el futuro de las luchas populares.
Hoy, como ayer, las canciones de Alí Primera resuenan en las calles, en las plazas y en los corazones de quienes siguen creyendo en la posibilidad de un mundo más justo. Su voz sigue viva, porque, como él mismo dijo: «No cantamos por cantar, ni porque tenemos la voz bonita, cantamos porque el pueblo necesita de nuestra canción».
