El dólar paralelo sigue haciendo su trabajo, mientras el común de los venezolanos sigue prestando atención a ese instrumento diseñado solo, para perjudicarse así mismo, el que tiene plata ríe, sobándose la cabeza, viendo como el pobre sufre, y él, alimenta sus esperanzas de sacar al gobierno, por supuesto; desde el teclado.
El Pasaje en Acarigua y Araure amaneció a dos bolívares, qué le puede afectar eso al bolsillo de «Don Perico de los Palotes», !ah pero Doña Emilia y Doña Juana! que llegaron de Payara esta mañana, se bajaron en el centro e iban al mercado de frutas y verduras del Sur. «2 Bolívares Señoras, el dólar aumentó, y el BCV está ahí pegaíto», dijo el Chofer, ¿Nosotras que tenemos que ver con eso? !Dicen las Viejas!.
«Bueno nada, es que el dólar sube y yo tengo que comprar repuesto, pagar gasolina bachaqueada, alimentar a mi familia, las tres queridas y mis amadas que tengo».
Pero señor;
!No se Quejen señoras!; vaya y reclámele a Maduro y a Primitivo que andan eligiendo propulsores y no sé que cosas, mientras el pueblo se muere de hambre.
Al final, pueblo contra pueblo y el oligarca, como si nada; «organizar el partido y buscar el candidato que seguro gana, con el apoyo del pueblo, saldremos de estos rojos pendejos, a fuerza de votos no agile y del dólar paralelo».
!No se me mojen señoras! está cayendo una mandilata de agua, se enferman, y las agarra el de la farmacia, ese si es cruel (…) finalizó diciendo el chofer, para lavar su conciencia mientras las viejas bajaban de la buseta, refunfuñando del chofer, pero !que bolas tiene el gobierno!
!Es verdad lo del gobierno dijo el colector! el mismo que del aumento no ve nada, todo pal dueño é buseta, y pal chofer; la mascada. Pueblo contra pueblo. El Domingo se ven en misa, las viejas, el chofer, el oligarca y el colector.
Édgar Alexander Morales
