
Desde la llegada de Hugo Chávez a la presidencia en el año 98, cada proceso electoral ha traído consigo un punto importante de referencia dependiente del momento histórico de la Revolución Bolivariana.
En esta oportunidad, se llevará a cabo un gran proceso de elecciones regionales y municipales de manera simultánea, donde los electores y electoras tendrán el derecho de elegir democráticamente a quienes consideren sean los más idóneos para los cargos de Gobernadores o Gobernadoras, Legisladores y legisladoras Regionales, Alcaldes o Alcaldesas y concejales o concejalas.
Cabe preguntarse: ¿que representa para el pueblo este mega proceso electoral?: Para el pueblo Chavista no solo simboliza una victoria más, sino que además su importancia se refleja en el reconocimiento democrático nacional e internacional del poder ejecutivo en todos sus niveles, así como el reconocimiento del poder electoral donde su sistema y proceso consultivo ha sido atacado, por 2 décadas, por quienes adversan a la revolución Bolivariana.
Por otro lado, para la oposición venezolana, que además de mantenerse dividida entre varias corrientes, este proceso electoral podría representar una especie de plebiscito, que «abriría las puertas para un referéndum presidencial en el 2022». Teniendo un escenario parecido a lo ocurrido en el 2013: donde la oposición trató de proyectar las elecciones regionales de ese año como un plebiscito, que según ellos comprobaría, mediante los votos, el poco respaldo a la Revolución Bolivariana.
Cabe resaltar que tanto en ese año como en este proceso del 21N La oposición, o una buena parte de las corrientes que la integra, no realizó propaganda electoral, sino que se dispuso a utilizar recursos para establecer una propaganda de guerra visceral. No llamaron a votar por sus opciones, sino a emitir el voto en contra de Nicolás Maduro, que no estaba postulado a las elecciones de alcaldes y gobernadores en ese entonces y que tampoco lo es ahora.
En conclusión, este proceso electoral del 21N tiene un alto grado de importancia en cuanto al rumbo integral de nuestro país, puesto a que no solo es lo ideológico-político lo que está en juego, sino todos los ámbitos del poder nacional.
Ronald Sánchez “Gallito”
Militante del PSUV
